Empezamos la revisión a los avances más leídos del año situándonos al otro lado para revisar, con una experta en el campo, diferentes puntos sobre la obtención del trabajo deseado. Si eres de los que buscan nuevo trabajo con el cambio de año, es un excelente punto de partida.
Heather McGregor se encargó de seleccionar candidatos durante 17 años, fundó una iniciativa para ayudar a recién graduados de minorías a encontrar su primer trabajo, ha escrito una guía de carrera para mujeres y es profesora de más de 15.000 estudiantes. Por todo eso vale la pena revisar sus listas de cosas a hacer y a evitar que ha publicado el prestigioso Financial Times.
Revisemos su lista de breves y prácticos consejos:
- ¿No sabes a qué dedicarte? Prueba diferentes opciones. Un buen comienzo puede ser apuntarse en una empresa de trabajo temporal donde probar diferentes trabajos e ir viendo qué te gusta… y qué no. Vale la pena añadir que se puede lograr lo mismo a desde posiciones de becario.
- ¿No has obtenido el puesto deseado? Especialmente para cargos iniciales en una gran empresa, como puestos en formación o becarios, no hay que desesperarse por recibir una negativa tras otra. Es cierto que puede resultar frustrante, así que la mejor opción es intentarlo en empresas más pequeñas del mismo sector. Otra posibilidad es empezar en departamentos más grandes y generales, del tipo risk management o auditorías internas, que además permiten entender mejor qué se hace realmente en cada departamento al estar expuestos a todos. Hay que saber, finalmente, qué agencia temporal proporciona empleados a la empresa deseada y registrarse en ella. El objetivo: entrar en la compañía deseada. Una vez dentro es más fácil llegar al departamento deseado.
- La regla de los dos años: Es deseable, de cara a futuros procesos de selección, que el primer trabajo “serio” dure al menos dos años. Siempre se podrá utilizar este como referencia de responsabilidad y compromiso desde el principio de la carrera, de que siempre has sido un empleado en el que confiar.
- Construye una red de contactos. En cada lugar de estudios superiores o de trabajo se ha de disponer al menos de una persona de referencia para el futuro. Una buena norma es contactar una vez al año para ponerles al día, del tipo “durante el último año obtuve un diploma en esto” o “fui promocionado por…”. Y es que resulta muy difícil referenciar a alguien quien no has sabido nada en años.
- Aprende finanzas. Aunque sea los conceptos básicos. Es un aspecto diferenciador y muy positivo en una entrevista de trabajo, que demuestra interés y preparación, nombrar algún aspecto de las finanzas de la empresa a la que estamos optando.
- Obtén títulos. No hablamos de universitarios, que se dan por tenidos o son innecesarios según el puesto, sino por ejemplo de piloto o entrenador. Aunque no tengan nada que ver con el puesto al que aplicamos, demuestran esfuerzo y compromiso.
- Rodéate de agentes: Deberías contarles a todos tus conocidos que estás buscando trabajo, qué tipo de trabajo, e incluso adjuntarles un CV. Nunca sabes por dónde se va a abrir esa deseada puerta.
Heather también nos obsequia con algunos aspectos a hacer y a evitar al elaborar el currículum:
- Incluye en la parte superior el nombre y cómo contactar contigo. Ha de ser algo que se encuentre de un vistazo.
- La longitud ha de ser de una o dos hojas DIN A4. Una carta de presentación, de una hoja, debe acompañar al CV para explicar por qué tu candidatura es ideal para la posición.
- Divide el CV en tres partes: educación, experiencia laboral e información adicional.
- No dejes periodos en blanco al exponer tu trayectoria: dan mala impresión y te van a preguntar por ellos.
- Siempre que sea posible, explica lo comprometido que estás o lo que has conseguido con lo que haces aparte del trabajo. No es lo mismo “Hago deporte” que “Hago deporte, cada año participo en los juegos solidarios de…”
- No incluyas el estado civil y el número de hijos. No es relevante de cara tu habilidad para llevar a cabo un trabajo y es algo que siempre puedes sacar a colación en la entrevista si hace falta.
- No incluyas tu fecha de nacimiento. Puede parecer sorprendente, pero en muchos países puede hacer que no conserven tu CV para otros procesos.
- Emplea un tipo de letra estándar: Arial o Times New Roman, opciones clásicas.
- No le pidas a otra persona que escriba tu CV. Como mucho pueden ayudarte con los apartados o con algún detalle concreto. Un buen entrevistador se dará cuenta de que no te explicas como lo expuesto en el CV.