
Históricamente, las startups tecnológicas de salud de la mujer (las llamadas femtech) han tenido dificultades para encontrar financiación. Aunque parezca increíble, los inversores no veían el gran potencial de un aspecto que, potencialmente, afecta a una enorme proporción de la población mundial.
En 2020 la situación cambió, y estas startups vieron cómo la inversión se doblaba respecto al año anterior, en lo que parece ser que fue el punto de partida de una nueva era. Vamos a revisar siete de estas startups, todas ellas receptoras de financiación recientemente y con un brillante futuro, y ver qué podemos aprender de ellas: