Desde 2013, la revista Fast Company dedica cada año un número a presentar los hábitos y horarios de algunos de los más prolíficos referentes en el mundo de los negocios y la cultura. Su editora, Stephanie Mehta, nos advierte de que no se trata de un manual para adictos al trabajo. Y es que es hora de reconsiderar la productividad y cómo combinarla con las humanas necesidades de relajarse, recargar energías o encontrar inspiración.