Como a tantos, a los protagonistas de esta historia, la pandemia por Covid-19 les pilló desprevenidos. Iban a abrir un restaurante en mayo. Luego, en julio… que pasó a ser agosto. Más tarde, en noviembre. Por el camino han ido reinventando el concepto, desde un restaurante pre-Covid hacia todo lo que puedan para mantener su sueño.